Dirty Talk

Más, necesito más, necesito sentir su cálida respiración y escuchar su suave y sensual voz contándome esas obscenas historias. Mi cuerpo se estremece anticipando la siguiente palabra y siento como me mojo más y más. “La apoyé contra la pared con fuerza y deslicé mi mano bajo su vestido rojo. Sus braguitas estaban mojadas...”. Su embriagadora voz junto al erotismo de sus palabras acarician mi piel apoderándose de todo mi cuerpo, haciéndome sentir terriblemente excitada. Mi imaginación me transporta a todas esas escenas repletas de sexo y tan solo deseo formar parte de la historia y convertirme en su protagonista. Sus obscenos susurros despiertan mi parte más morbosa y quiero que siga y siga hasta que mi cuerpo se deshaga en un intenso orgasmo con el placer indescriptible que me provoca ese éxtasis verbal.